Un equipo de Microsoft Research en Inglaterra trabaja en “gusanos” buenos que la compañía utilizará para distribuir las actualizaciones a los usuarios sin que estos tengan que molestarse en descargar nada del servidor central.
De la misma forma que los gusanos malignos se expanden de ordenador a ordenador autoreplicándose y buscando de forma automática nuevos ordenadores susceptibles de ser infectados, los que “soltará” Microsoft tendrán como objetivo buscar aquellos ordenadores que necesitan actualizarse y tapar vulnerabilidades antes de que el ordenador sea atacado por los “malos”.
Milan Vojnovic, uno de los miembros del equipo de investigación, asegura que estos gusanos no sólo serán más buenos, sino también más inteligentes que los otros, ya que podrán encontrar fácilmente a los ordenadores desprotegidos. Es más, sus gusanos serán capaces de aprender de las experiencias pasadas.
El gusano empieza instalándose aleatoriamente en un ordenador no infectado y después se dirige a otros ordenadores de la misma red. Si no consigue encontrar un cluster de equipos no infectados, cambia su estrategia de manera que pueda maximizar el número de ordenadores que parchea.